La compañía oftalmológica está presente en Castellón desde 1999 y ha atendido cerca de 65.000 pacientes en sus clínicas de la provincia
Clínica Baviera llegó a Castellón en 1999 y, en estos años, se ha consolidado como un referente en oftalmología en la provincia. Actualmente dispone de dos clínicas, una en la ciudad de Castellón (Avda. Hermanos Bou, 15) y otra en Vila-real (Avda. Francisco Tárrega 45). Cerca de 65.000 personas han sido atendidas por su equipo médico que ha sido pionero en las operaciones de cirugía refractiva láser. Tanto es así, que, gracias a estas intervenciones, han liberado de gafas y lentillas a cerca de 13.000 castellonenses.
Mitos de la cirugía refractiva láser
No obstante, a pesar de que la cirugía refractiva láser es una de las opciones más populares, seguras y efectivas para corregir los defectos visuales más comunes como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo, e incluso la presbicia, siguen existiendo ciertos mitos que generan inquietud. En este sentido, los profesionales de Clínica Baviera explican cuáles son los más comunes y la realidad de estos:
1.- Después de la cirugía hay que hacer reposo absoluto.
En realidad, este tipo de intervenciones son ambulatorias, el proceso quirúrgico en sí dura unos minutos y, tras un breve reposo en la clínica, el paciente se va con el ojo destapado para su casa. Por lo tanto, tras la intervención, especialmente en los pacientes tratados con la técnica Lasik que es la más habitual, no es necesario hacer reposo absoluto, aunque sí es recomendable que el paciente baje su actividad durante las primeras 24 horas y deberá seguir algunas recomendaciones básicas, como proteger los ojos con gafas de sol en el exterior y aplicar los colirios pautados por el oftalmólogo.
2.- Es una intervención dolorosa.
El miedo a someterse a una intervención es común en muchos pacientes, pero es cierto que la mayoría no experimentan dolor alguno durante el procedimiento gracias al uso de anestesia local (que se aplica en forma de gotas). Tras la cirugía, algunos pacientes pueden experimentar una sensación de incomodidad, especialmente en los pacientes operados con técnicas de superficie (PRK/Lasek), que va desapareciendo con los días y que suele ser controlable con los medicamentos pautados.
3.- Es una intervención peligrosa.
Aunque toda cirugía conlleva riesgos, la cirugía refractiva es muy segura, predictible y eficaz. Sus técnicas están validadas por la ciencia médica y forman parte de la práctica oftalmológica de modo universal desde hace décadas, logrando corregir el problema visual que se sufre y mejorando significativamente la calidad de vida del paciente.
En conclusión, la cirugía refractiva ofrece múltiples ventajas pues son operaciones sencillas, rápidas, seguras y personalizadas. Además, se realizan de manera ambulatoria, con anestesia tópica (gotas), sin apenas molestias para el paciente, con una recuperación rápida y con unos resultados muy satisfactorios. Una excelente manera de decir adiós a gafas y lentillas y poder hacer deporte con total libertad.
Para más información:
Clínica Baviera
900.180.100
www.clinicabaviera.com